Uno de los hobbies más gratificantes y que se está poniendo de moda en los últimos años, sin duda ayudado por los programas de televisión, es la reparación y restauración de vehículos antiguos. Conseguir devolver a la vida a estas verdaderas joyas es muy gratificante, al igual que entretenido.
En un mundo rodeado de estrés, buscamos cada vez más un hobbie que nos haga disfrutar, desconectar de nuestras tareas habituales, y si ello tiene su recompensa mucho mejor.
Esta práctica muy extendida en Estados Unidos, se está poniendo de moda en Europa. En parte, motivado por los programas de televisión donde descubrimos cómo hacer posible lo que un principio parece una quimera.
Seguramente a la mayoría de los apasionados al mundo del automóvil se nos vienen a la mente pensamientos y sentimientos cuando oímos hablar de un determinado modelo de vehículo clásico o antiguo. Quizás el Seat 600, el Escarabajo o el Mini?. Sin duda todos ellos nos traen buenos recuerdos. El poder trabajar en ese coche clásico que tanto te busca, encontrar lo recambios adecuados, montarlo con cuidado, cariño y esmero, e ir viendo día a día los resultados, es una de las experiencias más gratificantes que conozco.
Pero nada de ello es comparable a volver a escuchar el sonido de su motor al arrancar o pasear con esa joya por los alrededores de tu hogar. Simplemente ... ¡ Una sensación indescriptible !
